Cuando realizamos trabajos de remodelación, construcción o pintura,
ya sea de forma profesional o de forma particular en nuestro propio
hogar, utilizamos diferentes tipos de herramientas, que cuidamos
mucho porque son muy valiosas para nuestro trabajo, son únicas, tal
vez costosas y de difícil reposición. Nos esmeramos en su higiene y
mantenimiento, procurando prolongar la vida útil de cada una de
estas herramientas, porque sabemos que las necesitamos para realizar
correctamente nuestro trabajo.
Sin
embargo, a veces olvidamos el cuidado de las herramientas más valiosas
que poseemos para realizar cualquier tipo de trabajo:
NUESTRAS MANOS,
NUESTROS OJOS, NUESTROS OÍDOS, NUESTROS PIES, en definitiva, NUESTRO
PROPIO CUERPO. Los que como yo trabajamos hace mucho tiempo en la
construcción, sabemos por propia experiencia que los riesgos de
accidentes son muy frecuentes en este tipo de trabajo y sus
consecuencias pueden ser irreversibles si no poseemos un equipo de
protección adecuado.
En
líneas generales, en los trabajos de construcción, remodelación o
pintura estamos expuestos a:
Lesiones por objetos
móviles, materiales desprendidos, etc.
Lesiones originadas por
aplastamientos
Lesiones originadas por
golpes contra objetos
Lesiones acústicas por
exposición al ruido
Lesiones respiratorias
por inhalación
Lesiones en la piel por
exposición prolongada al sol o a productos químicos
Por lo
tanto, antes de encarar un proyecto de construcción, remodelación o
pintura, debemos evaluar los riesgos que estas tareas conllevan, cuáles
son las partes de nuestro que quedarán más expuestas a sufrir algún tipo
de lesión y procurarnos un EQUIPO DE PROTECCIÓN adecuado, para poder
trabajar de forma segura.
En líneas generales, un equipo de protección deberá:
Ser adecuado a los
riesgos de los que haya que protegerse, sin suponer de por sí un riesgo
adicional;
Responder a las
condiciones existentes en el lugar de trabajo (interiores, exteriores,
exposición a químicos peligrosos, contacto con maquinarias, trabajos de
altura, etc.);
Tener en cuenta las
exigencias ergonómicas y de salud de quien realiza la tarea de riesgo;
Adecuarse al portador,
y de no ser así, realizar los ajustes necesarios.
En
líneas generales, para realizar trabajos de construcción, albañilería o
pintura podemos necesitar:
CASCOS, para aquellos
trabajos que riesgos de golpes en la cabeza por desprendimientos o
caídas
GORRAS CON VISERA, para
trabajos en el exterior con prolongada exposición a los rayos solares
MÁSCARAS, para proteger
nuestra cara en trabajos de soldadura u otro tipo de fundición de
metales
GAFAS, para proteger
nuestros ojos en trabajos de lijado y pulido de superficies
GUANTES, para trabajos
de pintura y manipulación de materiales químicos, ácidos o cáusticos
CALZADO DE SEGURIDAD,
con punteras de acero reforzadas, para aquellos trabajos en los que
manipulemos objetos muy pesados o para evitar lesiones por
desprendimiento de bloques de material pesados
TAPONES u OREJERAS,
para proteger nuestros oídos de una exposición prolongada a ruidos
extremos provenientes de máquinas
VESTIMENTA, adecuada a
cada tipo de tarea. En líneas generales, una buena ropa de trabajo no
debe tener bolsillos, debe ser ajustada al cuerpo pero permitir la
libertad de movimiento. Evitar las mangas largas arremangadas, porque
pueden engancharse con otras herramientas o máquinas y provocar un
accidente.
CINTURONES DE SEGURIDAD
o ARNESES,
si vamos a realizar trabajos de pintura o de construcción en
alturas
RECOMENDACIONES IMPORTANTES:
Antes de realizar un
trabajo de pintura o de remodelación, debemos quitarnos todo tipo de
joyas u ornamentos que tengamos en el cuerpo, tales como relojes,
cadenas, colgantes, anillos, aros, pulseras, piercing, etc. Además de
preservarlos de un posible deterioro, debemos tener en cuenta que son la
causa frecuente de accidentes, porque pueden engancharse en las
herramientas o máquinas que estamos utilizando.
Si tenemos el cabello
largo, debemos atarlo, o colocarnos un gorro. De ese modo, evitaremos
que se dañe el cabello, pero, lo más importante, evitaremos que se
limite nuestra visibilidad o que se enganche con otros elementos, como
herramientas o máquinas que pueden estar en el ambiente en el que
estamos trabajando.